Oriundo de la ciudad de Luján, Luis Mendoza es uno de los compañeros que todas las semanas disfruta de jugar al tenis en nuestro Camping 26 de noviembre, éste enero de 2019 decidió escalar el Aconcagua, la montaña más alta de América con 6.960,8 metros sobre el nivel del mar (msnm) que se encuentra en la Provincia de Mendoza.

Junto al guía de montaña y “hermano” (como lo denomina Luis) Julián Insarralde emprendió el ascenso llevando la Bandera de APUR. También fueron parte de la expedición, que duró más de diez días, dos lituanos, Donatas y Marius.

Luis cuenta que la primera etapa del ascenso es de aclimatación donde se hace cumbre en el Cerro Mirador del Tolosa a 4100 msnm. Luego se llega al Campamento Base Plaza de Mulas a 4260 msnm para continuar al Cerro Santa Elena a 4600 msnm.

El próximo campamento es en Plaza Canadá a 5050 msnm donde nos cuenta que pasó una de las noches más frías, “adentro de la carpa se congeló todo y afuera nos dijeron que hizo 40 grados bajo cero”. “Desde allí el ascenso se pone cada vez más difícil con 55 y hasta 65 grados de inclinación para caminar, ¡una locura!” recuerda.

Por ese trayecto se llega a Nido de Cóndores, el penúltimo campamento de altura de Aconcagua esta 5580 msnm. Allí decidió dar por terminada la expedición, nos cuenta que la decisión la tomó “por una cuestión de que sentía que tenía físico para llegar pero no sabía si iba a bajar cómodo como quería, allí ya se nota que el aire es más finito y las piernas tardan en responder. Vi gente que la bajaban a la fuerza en un estado que yo no quería bajar y como hasta ese momento había disfrutado todo el viaje dije, ¿para qué seguir?, voy a perder todo lo que había disfrutado arriesgando el físico, la montaña de ahí no se va a ir, así que en algún momento volveré”.

“Su segunda casa” así se refiere Luis al hablar del Camping “26 de Noviembre”. “Aquí la gente es muy buena onda, es como una gran familia y disfruto jugando al tenis y siempre uno va donde la pasa bien”. Por eso le pidió a Sergio Galla (uno de los responsables de la práctica del Tenis en el Camping) la Bandera para llevar al Aconcagua “porque me siento parte de esta familia de APUR”.

Con miras al 2019, Luis espera poder representar a APUR en el Torneo Interclubes, a pesar de no haber podido hacer completa la pretemporada, dice riéndose y en referencia a la aventura al Aconcagua que “piernas me sobran para jugar”.

Como final de nota resalta el buen cuidado de las instalaciones del Camping “26 de Noviembre”, “aparte de estar al costado del río, la comodidad en los vestuarios nuevos, se ve que día a día se le siguen haciendo cosas, las canchas están manteniéndola continuamente y eso está bueno”.